Parece que JavaScript está deshabilitado en su navegador. Para obtener la mejor experiencia en nuestro sitio, asegúrese de activar Javascript en su navegador.
https://www.diegomarin.com/
Esta opción no le obliga a finalizar la compra.
Procederemos a gestionar su pedido sin compromiso.
Contactaremos con usted a la mayor brevedad posible.
Sus datos
Lo sentimos pero no se ha podido realizar la solicitud del producto.
Si ya tiene una cuenta con el email introducido, por favor inicie sesión aquí.
Vuelva a intentarlo y si el problema persiste póngase en contacto con nosotros.
Gracias.
Contactar
Contactaremos con un usted a la mayor brevedad posible.
Colección: BIBLIOTECA DE DERECHO PENAL Y POLITICA C
Núm.Col./Núm.Vol.: /
Núm.Edición: 1
`El derecho penal en las últimas décadas ha profundizado un proceso de enclaustramiento intra-científico es decir que ha seguido hablando en la oscuridad en sus conceptos pseudo filosóficos y procurando la oscuridad de sus teorías para darse aires de superioridad epistemológica sobre los colegas jurídicos y para ocultar con mayor enjundia los posicionamientos políticos que los penalistas o mejor dicho los cultores de la teoría del delito. Porque en el fondo lo que nos parece grave de la situación actual es que el llamado derecho penal se ha limitado solamente a hablar del delito y sus aposta oscuras teorías dogmáticas. Y se ha desentendido de la pena que es su núcleo epistemológico central del derecho de la pena de la teoría del castigo. Ya Beccaria en su célebre Dei delitti e delle pene de 1764 había planteado que quien estudie estas cuestiones debe hacer en igual medida análisis del delito y de la pena del crimen y del castigo. Sin embargo el siglo XX y la teoría neokantiana